Aprenda inaugura su nueva sede
Aprenda, la protectora de animales de Écija estrena por fin su nuevo refugio. Tras varios años de trabajo la protectora ha inaugurado su nueva sede en un cortijo alquilado en la carretera A-364, entre Écija y Marchena.
A más distancia de Écija que el anterior refugio, Aprenda reconoce haber realizado una larga labor de trabajo por parte del voluntariado, ya que el traslado era necesario para la asociación y sobre todo para los animales. El principal motivo por el cual la protectora decidió trasladar su sede fueron las nefastas condiciones en las que se encontraban los animales en el refugio anterior. Ya que según afirma la presidenta de la Asociación, Victoria Rodríguez, en muchas ocasiones se han visto en la situación de instalar palés de madera provisionales en días de lluvia para que los animales no quedaran enfangados en las jaulas.
Con grandes instalaciones en la actualidad, el nuevo refugio de Aprenda ha supuesto un gran coste económico, en este aspecto, la asociación ha contado con la colaboración de la protectora francesa Lévriers Sans Frontiéres, que ha participado económicamente, con camas, mantas y pienso para los animales. Además,Aprenda ha estado realizando rifas y eventos para la recolecta de donativos, junto a donaciones de voluntarios y empresarios que han contribuido a la causa, sin olvidar el Ayuntamiento que ha facilitado la subvención del refugio con su tarea.
Esta asociación lleva actuando en Écija desde 2002, con su acción principal centrada en la protección de los perros la asociación está planteando la construcción de una gatera, ya que tanto perros como gatos son los animales más afectados por los abandonos. Aunque el problema fundamental para la asociación junto al económico es el espacial, la asociación pone por bandera el bienestar y salud de los animales. Por ello, solo albergan en cada cheníl el número correcto de animales, unas normas y espacio para unos 150 animales, 160 si sumamos a los que pasan la cuarentena. Esta norma es fundamental, ya que el exceso de estos puede ocasionar problemas en la mayoría de ocasiones.
Con un fuerte punto de acción la asociación ayudó entre el 2014 y 2015 alrededor de 248 perros, trabajo realizado por sus 15 voluntarios, los cuales han jugado un papel muy importante en la construcción de este refugio. Su trabajo ha sido fundamental ya que ellos mismos han construido los cheniles (más de cincuenta) para los perros, han segado los sumideros de la antigua granja de cerdos y limpiado de hierbas los solares abandonados que han convertido en zonas de paseo y de juego para sus perros.
Además, la asociación tiene en mente la creación de una aula didáctica que recibirá la visita de centros educativos con el principal fin la concienciar a los más pequeños los deberes y obligaciones que conlleva tener una mascota en casa y sobre todo las consecuencias y el daño que pueden sufrir los animales cuando son abandonados o maltratados.
Con gran ilusión y afán en su labor Aprenda demanda la participación de voluntarios para la realización de actividades con los animales y atención de estos, y socios ya que ambos son fundamentales para el funcionamiento de la asociación.