El centro de  Primer Ciclo de Educación Infantil “Las Torres de Colores”, que se vio afectado por el positivo de unas de sus monitorias de apoyo hace una semana está libre de coronavirus. Un total de 26 niños y 3 profesoras se han hecho las pruebas PCR y todas han sido negativas.

Estas pruebas se hicieron a aquellos miembros de la comunidad educativa del centro que las autoridades sanitarias consideraron de riesgo y siempre de forma preventiva, pues las medidas higiénico-sanitarias siempre habían sido las correctas, lo que hacía más complicado el contagio.

La alarma la hizo saltar una monitora de apoyo, que no presta servicio continúo en ninguna clase en concreto, pero que por precaución ha llevado a realizar la PCR a niños de 3 clases diferentes y a las tutoras de clases en las que esta monitora prestó servicio.

Sin embargo, en ningún momento se cerraron clases, ni siquiera las afectadas, lo que si había era niños afectados en tres clases diferentes de 1-2 años y de 2-3 años y son los niños con los que esta monitora había tenido contacto directo y tal y como lo consideró oportuno la autoridad sanitaria. El resto de alumnos continuó sus clases con normalidad.

La monitora afectada en todo momento llevó mascarilla y no había permanecido un tiempo extenso con los alumnos al ser de apoyo. Además, fue la propia monitora la que indicó el positivo al centro y al saber que había estado en contacto con un positivo, incluso antes de ser diagnosticada, se quedó en casa reduciendo las posibilidades de contagio.

El centro desde su apertura puso en marcha un riguroso protocolo antiCOVID y por supuesto, todo el personal recibió su resultado negativo en PCR incluida la monitora ahora afectada, antes del inicio de las clases.